Adelaide es una ciudad australiana, apacible y conservadora, tiene un toque especial por su gente. Cuando los primeros colonos fundaron la ciudad, la construyeron con piedras de una manera sólida y de aspecto solemne, civilizada y tranquila como ninguna otra capital de estado de Australia. Debido a su localización geográfica en una de las zonas vinícolas por excelencia, cuenta con hermosos recorridos por los viñedos, antiguos pueblos de ascendencia germana y hermosos paisajes de montaña. La capital del estado South Australia ofrece a sus visitantes un ambiente sofisticado y en armonia con la naturaleza para disfrutar los simples placeres de la vida, a veces ovidados por la velocidad del mundo moderno. Además es la puerta de entrada a Kangaroo Island, la tercera isla mas grande de Australia y tiene una cantidad enorme de hermosas playas, paisajes, Parques Nacionales y abundante fauna nativa
En Adelaide se puede:
Visitar una playa habitada por leones marinos en estado natural, recorrer la Isla Kangaroo y entender porque tiene este nombre, disfrutar de uno de los sistemas de biodiversidad mas aislados del paìs, con una gran variedad de plantas endémicas y animales como: wallabies, koalas, canguros, delfines, pingüinos, goannas, focas, ballenas, visitar la zona vinícola más importante de Australia y degustar alguno de los más famosos vinos, recorrer las callejuelas de una villa alemana y probar uno de los deliciosos pasteles ahora típicos de la región, recorrer el jardín botánico en bicicleta o bote, nadar con delfines o aprender a velear en el puerto de Glenelg, hacer un picnic al aire libre en el jardín que ocupa casi la mitad de la ciudad, conocer el tranquilo puerto de Victor Harbour y dar un paseo en tranvia jalado por caballo hacia la Isla Granite sobre un largo puente de madera, hacer excursiones de buceo en jaula para conocer de cerca al gran Tiburón Blanco, etc.
